Una versión actualizada del cuento de Caperucita roja, eso es Freeway (1996), una película diferente que pasó sin pena ni gloria, ignorada por el gran público, y eso que contó con un padrino de excepción, Oliver Stone.
En este cuento fílmico abundan la violencia, las situaciones desagradables, las desviaciones sexuales (incluyendo la pederastia y la necrofilia), las palabras malsonantes y el humor negro. El argumento, claro, es el consabido con un par de variantes modernistas que estilizan este film de Matthew Bright. La Caperucita es Reese Whiterspoon, una adolescente nada ingenua que ve como su vida se desmorona cuando sus padres (ella, prostituta neurótica; él padrastro drogadicto también incondicional al incesto) son detenidos y metidos en la cárcel. Demandando algo de cariño y afecto, parte en busca de su abuelita, por una autopista maldita que le hará toparse con un violador/asesino de adolescentes, un lobo con cara de psiquiatra , que encontrará en la joven una resistencia y obstinación, extremas.
Para los años que corrían durante su estreno, la película articulaba ya temas tan poco convencionales como la prostitución infantil, el sexo oralizado, el abuso de menores, las cárceles de mujeres, la violencia extrema... disfrazados a modo de cuento adolescente de malos y retorcidos, donde Caperucita (con su cesta y su cazadora roja, con sus trencitas y rostro angelical) se transforma en una cruenta vengadora, que reacciona de modo salvaje a las no menos salvajes acometidas de sus agresores y guardianes y, el lobo, atraído por una jovencita demasiado incordiada por el mundo de los mayores, apenas si le quedan dientes para intentarlo una vez más.
Véanla, señores, no les dejará indiferentes. En mi caso, la vi con mi profe de instituto de literatura (sí, sr. Nota, nos llevó J. Silvestre, jaja), en 3º BUP (madre mía, aún existía BUP, jajaja) y nos dejó en estado de shock, quizá por cosas de la edad, quizá por la película en sí. Compruébenlo ustedes mismos. De momento, les dejo con una Caperucita en fieltro, para ir abriendo boca (del lobo).
11 comentarios:
La veremos, si lo dice usted, la veremos.
besos
Así me gusta, que se me tome en serio,jajajaja. Hombre (perdón, mujer), quizá la veo ahora con 10 años y no me conquista, pero entiéndame, con 16 años, en los Babel, rodeada de chicos con gafas y patillas, las hormonas revolucionaditas...jajaja, el ambiente hizo mucho. Pero,de todas formas, si la recuerdo todavía tanto, por algo será.
Después de contar intimidades,jaja, le lanzo unos cuantos chuiks!
En los scouts cantábamos una canción sobre Caperucita...Martes y treece de enero a las treees Caperucita Rodríguez Cortés Uououo va a la casiiitaaaa de su abuelitaaa con leche y mieel en una cestitaaa...
También era una versión actualizada del cuento de toda la vida, porque Caperucita iba escuchando la radio o algo así, que si ganaba el Betis... y es que no me acuerdo de más...
Ay ahora me arrepiento de haberme cargao al gato...
Con la cara de inocentona que tiene tu muñequita, y vaya historia más tétrica, jajaja. Tanto como "Funny Games u.s.". Por cierto, qué tarde de tensión la de ayer, no sé si por la de la propia película, o por la gente, que es tan insensible que se ríe de las desgracias ajenas por el hecho de ser ficción, al mismo tiempo que no sabe captar las sutilezas de la ficción cinematográfica...aj! (desprecio pedantesco, jaja). Pues eso, a ver cuando me pones esta peliculita, la de la caperucita postmoderna, ¡y ahora yo me pido ser uno de esos acompañantes de patillas y gafas!
águeda: ays, ays...lo del gatito...jaja, bueno, ya sabes lo que dicen: "en el pecado siempre está la penitencia",jaja, y bueno, aunque me duele mucho, creo que el animalito estaba predestinadoa morir. Qué bonita canción esa que canats, yo quiero toda la letra, vaaaaaaaa, consíguemelaaaaaaaa...Besos, como siempre, PoP.
Niño: sí, una buena peliculita, lástima que nos la fastidiaran un poco esos niñitos que teníamso justo detrás, qué lástima, tan jovencitos y la tele les ha dejado ya sin sensibilidad. Pues sí, nota pedantesca la tuya pero cierta, jaja, no supieron captar el juego que propone Haneke de la violencia por la no violencia, es angustiosa la peli, pero no violenta en sí.Jajajaja, es verdad, ahora tú eres el acompañante de patillas y gafas, te puedes creer que no lo había pensado???jaja. Besos también PoP!
A MI SILVESTRE NO ME LLEVÓ..SNIF..
Uy, a mi sí, creo que yo le caía mejor que tú,jajaja, auqnue en realidad eso no es muy bueno que digamos...uhm...jajaja. Sí, nos llevó en 3º de BUp y todos en clase diciendo "sí,sí, vamos" y después sólo estábamos allí Luke, él y yo, imagínate el panorama,jajaja.
QUÉ LÁSTIMA...CON LO QUE HA SIDO ESE HOMBRE
cosas de la vida
TUVO QUE DEJAR LAS DROGAS MUCHO ANTES...
Uy, y ahora eso está a la orden del día en los coles, pero por aquel entonces fue la primera vez que yo vi el tráfico de drogas,jajaja.
Muas!"
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